La elección de pareja es una de las experiencias mas importantes de nuestra vida, pues de su acierto o su error depende en gran medida nuestra felicidad.
Pero en ocasiones esta elección no se hace de manera calmada y tranquila, mas bien en algunos casos lo hacemos para no estar solos, para salir de una situación conflictiva (divorcio, rupturas sentimentales, problemas familiares, etc) y en otros muchos casos para acabar con una vida de monotonía y aburrimiento.
No hay que decir que la pareja elegida por estos motivos expuestos anteriormente no va a ser la adecuada, y mucho menos duradera y satisfactoria. Quizás el motivo principal para buscar la media naranja, es compartir el día a día con esa persona y que este viaje que es la vida podamos hacerlo acompañados. Pero esto, como veremos en otros artículos, no siempre es fácil, ya que la vida en pareja requiere muchas veces de esfuerzo y compromiso.
Una vez que he decidido buscar pareja o que la he encontrado sin buscarla, que es lo mas frecuente, se recomienda centrarse en los valores internos. Porque aunque lo que primero aparece es el “flechazo” motivado por el aspecto físico, este es un fenómeno efímero que tiende a disiparse sino hay nada mas.
Todo el mundo queremos a nuestro lado un compañer@ que nos quiera, nos respete y nos valore. Y estos principios se encuentran en el interior de las personas no en su aspecto exterior.
El enamoramiento o pasión dura según los expertos dos años aproximadamente, para luego dar paso al amor mas sereno basado en el respeto, complicidad, conocimiento y compromiso. Este proceso vital requiere de una pareja fuerte y segura.
Como conclusión, diría que enamorarse es una de las mejores cosas de la vida. Y por eso hay que arriesgarse a buscar el amor aunque en ocasiones toque sufrir por ello.